Hoy os traigo una propuesta de desayuno saludable: un bowl con yogurt natural, fruta fresca y avena.
Este desayuno es perfecto, ya que nos aporta la energía necesaria para afrontar las mañanas.
Además, está compuesto de avena, una gramínea de origen asiático que no sólo es buena por su alto contenido en fibra (una taza contiene la misma cantidad de fibra que un plato de coles de Bruselas); es muy versátil y se puede encontrar en cualquier supermercado.
¿Sabías que...?
Puedes consumir la avena en copos o molida y también encontrar una opción integral para aumentar aún más la cantidad de fibra.
La avena contiene mucha fibra y por ello su capacidad saciante es tan elevada. Una ración de copos de avena con leche desnatada/vegetal o un yogurt sin azúcar y un poco de miel tiene entre 250 y 300 kcal, por lo que es ideal para el desayuno.
INGREDIENTES:
40 gr de avena
80 gr de yogurt natural
1 pieza de kiwi
1 pieza de plátano
frambuesas al gusto
miel o sirope de agave (opcional)
PREPARACIÓN:
En un bowl, disponemos el yogurt a modo de base.
Pelamos y cortamos el kiwi y el plátano y los disponemos sobre el yogurt.
Espolvoreamos la avena por encima.
Coronamos con las frambuesas.
Añadimos un chorrito de miel o sirope (este paso es opcional).
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