El último reto propuesto por Cocinando Sabores ha sido preparar Petit Suisse de forma casera.
Nosotros, hemos optado por el clásico sabor a fresa, aportando un toque especial con la frambuesa.
Además, lo hemos elaborado de forma saludable, utilizando sirope de agave para endulzar y queso cremoso light.
Os animamos a preparar este postre tan sencillo y que tanto gusta a los más peques de la casa.
INGREDIENTES:
300 gr de queso fresco tipo philadelphia (light)
200 gr de fresas
100 gr de frambuesas
3 hojas de gelatina
50 gr de sirope de agave
125 ml de leche evaporada
UTENSILIOS NECESARIOS:
varillas eléctricas
lengua o espátula
moldes individuales (flaneras) o tarros de cristal (los típicos de yogurt)
PREPARACIÓN:
Trituramos las fresas y las frambuesas hasta obtener un puré de textura ligera. (Si queréis, podéis colarlo para que no queden pepitas y el petit suisse quede sin nada de grumos. A nosotros nos dió lástima tirar tanta pulpa y decidimos incorporarla a la mezcla).
Una vez tengamos colado (o no) el jugo de fresa y frambuesa, lo mezclamos con el queso fresco hasta que todo quede bien integrado.
En un cazo, ponemos nuestra mezcla a fuego medio y dejamos calentar sin parar de remover.
Una vez caliente, lo retiramos del fuego y añadimos las 3 hojas de gelatina (previamente hidratadas en agua fría).
Mezclamos y dejamos reposar. La mezcla debe enfriarse.
En un bol, batimos la leche evaporada con ayuda de unas barillas eléctricas. Debemos conseguir una textura parecida a la de la nata montada, aunque, cuando paréis de batir, la leche perderá aire.
Incorporamos paulatinamente la leche evaporada montada con la mezcla de queso y frutas.
Disponemos la mezcla en los vasitos o moldes que queramos y dejamos enfriar toda la noche en la nevera.
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