Las galletas son un clásico navideño; podemos encontrar desde las clásicas con pepitas de chocolate hasta las que llevan cítricos, mantequilla, especias, etc.
En este caso, os proponemos dos variantes de las tradicionales galletas de navidad, elaboradas en base a mantequilla: galletas de jengibre y galletas de limón.
Los ingredientes base para ambas recetas son básicos: harina (en nuestro caso integral), huevo, panela, mucha mantequilla y especias o elementos para aromatizar.
Ya veréis que son muy fáciles de preparar y quedan muy resultonas. Son perfectas para regalar en el amigo invisible.
INGREDIENTES:
400 gr de harina integral
1 ud huevo campero
200 gr de mantequilla pomada (a temperatura ambiente)
120 gr de panela
Aromatizantes para las galletas de jengibre:
2 cucharaditas de canela en polvo
2 uds de clavos molidos
media cucharadita de nuez moscada
media cucharadita de jengibre en polvo
Aromatizantes para las galletas de limón:
Ralladura de la piel de 2 limones
1 cucharadita de canela en polvo
Cómo véis, los ingredientes que necesitamos son muy fáciles de encontrar, seguro que tenéis casi todos en la despensa.
UTENSILIOS NECESARIOS:
Cortapastas de distintas formas (estrellas, árboles, corazones, etc)
Barillas (eléctricas mejor)
Rodillo
Papel de horno/sulfurizado
PREPARACIÓN:
Precalentamos el horno a 180°C con temperatura arriba y abajo.
En un bowl, ponemos la mantequilla pomada cortada a trozos y la panela. Batimos con unas barillas.
Cuando se hayan integrado los dos elementos, añadimos el huevo y batimos hasta incorporarlo.
Mezclamos los elementos secos: harina (previamente tamizada), especias y/o elementos aromatizantes.
Incorporamos poco a poco a la mezcla y batimos hasta incorporar todos los elementos. Nos debería de quedar una textura de “crumble” húmedo.
Formamos una bola con la masa y la dividimos en dos porciones para trabajarla mejor.
Espolvoreamos un poco de harina sobre nuestra mesa de trabajo y, con ayuda de un rodillo, amasamos la masa hasta conseguir un grosor de 0,5 cms.
Con ayuda de los cortapastas, vamos haciendo las galletas y las disponemos en una bandeja de horno cubierta con papel sulfurizado.
Horneamos a 180°C durante 10-12 minutos (os aconsejo ir controlando las galletas para que no se tuesten de más).
Dejamos enfriar y ¡tachán! Seguro que sorprendéis a vuestros amigos con estas galletas tan ricas.
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